Aceite Vegetal de Ricino "ricinus communis"

El aceite vegetal de ricino tiene una rica historia que se remonta a las antiguas civilizaciones egipcias. La planta de ricino, Ricinus communis, es originaria de África Oriental y fue llevada a otras partes del mundo por los exploradores portugueses. Hoy en día, se cultiva en todo el mundo como una planta ornamental y para la producción de su aceite.

El aceite de ricino es conocido por sus propiedades emolientes y humectantes, lo que lo hace ideal para su uso en productos cosméticos y de cuidado personal. También se sabe que tiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas, lo que lo convierte en un ingrediente efectivo en el tratamiento del acné y otras afecciones de la piel.

La forma más común de obtener aceite de ricino es mediante presión en frío de las semillas de la planta. Las semillas contienen una gran cantidad de aceite, aproximadamente el 50% de su peso total. El aceite resultante se filtra y se purifica antes de su uso.

El nombre botánico del ricino es Ricinus communis, y su INCI (International Nomenclature of Cosmetic Ingredients) es Ricinus communis seed oil. Su número CAS es 8001-79-4.

Los principales componentes del aceite de ricino son ácido ricinoleico, ácido oleico y ácido linoleico. El ácido ricinoleico es responsable de la mayoría de las propiedades beneficiosas del aceite de ricino, incluida su capacidad para estimular el crecimiento del cabello y las cejas.

En resumen, el aceite vegetal de ricino es un ingrediente popular en la industria cosmética y de cuidado personal debido a sus propiedades emolientes, humectantes, antiinflamatorias y antibacterianas. Se obtiene mediante la presión en frío de las semillas de la planta Ricinus communis y su principal componente activo es el ácido ricinoleico.